Tomate platense con DNI propio
Pensar la ciencia y la tecnología desde una perspectiva local es una importante contribución a sectores como la agricultura familiar que vienen desarrollando el cultivo del tomate platense en el cordón hortícola platense desde hace mucho tiempo. Es en este sentido que el Doctor en Ciencias Exactas, área Biología, y Licenciado en Biotecnología y Biología Molecular, Raúl Amado Cattáneo, dirige un proyecto de extensión del Banco de Germoplasma y, además, coordina el programa de extensión de Alimentos y Salud de Exactas. En paralelo, el investigador, realizó un proyecto de investigación en su tesis doctoral referido a las variedades del tomate local aportando valor agregado a ese tipo de producción que permita a los productores locales mejorar la calidad de su trabajo.
En busca de una definición del tomate local
Para los que habitualmente consumimos tomate, muchas veces, no nos damos cuenta la diferencia entre el que proviene de una producción comercial y el obtenido por productores locales, sin embargo Amado Cattáneo especifica las procedencias: "el tomate comercial se define como homogéneo genéticamente y estable en el tiempo, en cambio una variedad local tiene características culturales e identidad propia. También posee características agronómicas y organolépticas, a su vez tiene una alta diversidad genómica y es heterogéneo en contrapunto de las variedades comerciales".
Precisamente, el trabajo de tesis del investigador permitió establecer, a su vez, dos grandes resultados: por un lado la alta diversidad genética que tiene la variedad local la cual permite conservar la biodiversidad agronómica y por otro, se pudo precisar con un 99,99 % la identidad de las subpoblaciones del tomate platense.
Amado Cattáneo, por otra parte, aclara que el término "subpoblaciones de tomate platense" se relaciona con el nombre de las familias a las que pertenecía esa semilla. En consecuencia se pueden asociar a los apellidos de las mismas como Gentile, Carcione, Del Manso, etc.
Hacia la denominación de origen
El hecho que en nuestra zona existan subpoblaciones de tomate ligadas a la procedencia familiar de las semillas, conlleva a una categoría comercial muy importante, define el investigador de la Facultad de Ciencias Exactas, porque estaríamos en la instancia de la denominación de origen. Este concepto le daría a nuestro tomate un valor agregado para comercializarlo de manera diferente, acrecentar su identidad cultural y referenciar a la zona como un producto platense con identidad propia.
Por otra parte, es importante tener en cuenta el costo del kilo de semillas provisto por las empresas semilleras, el cual puede rozar los 90000 dólares, en contraposición al el de producción nacional que sale muchísimo menos. Esta realidad comercial conlleva, señala Amado Cattáneo, a recuperar genéticas que están en bancos genéticos en otros lugares del mundo y a construir una base genética amplia y propia en nuestro país; algo así como sostener un concepto de soberanía de semillas propias.